¿Quién era Kircher?


ATHANASIUS KIRCHER fue un sabio jesuita alemán que representó el espíritu científico del siglo XVII. Nació en Geisa (Alemania) en 1602. Profesor de filosofía, matemáticas y lenguas orientales, se interesó por los más diversos temas del saber de su tiempo.

Fue el inventor de la linterna mágica, cartografió la Luna, las manchas solares y las corrientes marinas, ofreció hipótesis para interpretar la estructura interna de nuestro planeta, investigó el Vesubio descolgándose por su cráter, trató de descifrar los jeroglíficos egipcios, realizó experimentos de física y fisiología animal, observó la sangre al microscopio e inventó un sinnúmero de artilugios mecánicos.

Junto con Plinio, constituye el paradigma de la curiosidad científica y del gusto por el conocimiento, en cualquiera de sus formas.

domingo, 10 de octubre de 2010

Dígaselo con Power Point



DIEZ RECOMENDACIONES BÁSICAS
PARA UN USO DIDÁCTICO EFICAZ DE POWER-POINT:

Juan V. Fernández de la Gala

Resumo aquí mi propia experiencia personal en la utilización didáctica del programa Power Point, un recurso del que hoy usamos (y ab-usamos) los docentes en todos los niveles educativos. Lo hago con cierta desconfianza, porque ya sabemos que en este tipo de cosas sirve más la cocina propia que la receta ajena. El uso, mejor que los consejos, nos dará las pautas que más se ajusten a nuestro estilo.

            Por eso me apresuro a decir que estas diez recomendaciones son fruto de mis propios errores y también de los que he creído ver en otros. Las recopilo aquí de forma sistemática para responder a la invitación de algunos compañeros, deseosos de compartir experiencias y con el ánimo de que puedan ahorrar a otros el tiempo que yo he perdido en aprehenderlas. Porque ya saben lo que dice la sabiduría del pueblo: “el que no experimenta en cabeza ajena, le será forzoso experimentar en la propia”.

Ahí van:

1)     CÓMO EMPEZAR. Lo habitual es comenzar por una diapositiva que sirva de portadilla, elaborada con cierto criterio artístico para atraer la atención. Esta primera diapositiva incluye el título de la presentación y, opcionalmente, el nombre del autor y algunos logotipos institucionales. Hay quien añade la fecha y el lugar de la sesión, como un detalle de cortesía que da a entender que se ha preparado expresamente para el caso. Si su intervención tiene un largo prolegómeno, cuide mucho la portadilla, porque estará expuesta más tiempo que las demás y será su tarjeta de visita. En la segunda dispositiva incluya un índice o sumario de los temas que va a tratar. A veces resultará útil repetir esta dispositiva cada vez que se pasa de una sección a otra. Nos servirá al tiempo de separador y de guión temático. Cuide que los temas del sumario guarden una clara secuencia lógica.

2)      CÉNTRESE EN LAS IMÁGENES. Una presentación de Power Point NO es un modo sofisticado de escribir en la pizarra. Olvide el texto y centre su presentación en las imágenes. Las nuevas generaciones de alumnos están mejor educadas en lo visual que sus propios profesores. Es, pues, un público exigente. Busque imágenes impactantes y nítidas, con fuerte capacidad motivadora. El texto es secundario y podrá usted añadirlo de viva voz. La mayor parte del tiempo de preparación de la presentación debería dedicarse a la búsqueda de las imágenes más adecuadas.

3)      Cuide el TAMAÑO Y LA POSICIÓN DE LAS IMÁGENES. Diséñelas tan grandes como le sea posible, pero cuidando que no pierdan ninguna nitidez al proyectarlas. La ley de Starch de los publicistas asegura que la máxima eficacia visual para las imágenes se logra en el cuadrante superior derecho de la pantalla. Así que, cuando sean imágenes pequeñas, colóquelas ahí. Y si son algo mayores que un cuadrante de diapositiva, pueden ir alineadas al margen derecho. Evite siempre el cuadrante inferior izquierdo, que es el de menor impacto.

4)      Añada luego UN TEXTO MÍNIMO que a usted le sirva como guión y a los alumnos como referencia. La ley de Brandt sostiene que la máxima eficacia visual para un texto se logra en el cuadrante superior izquierdo de la diapositiva. Sitúe allí la información más relevante. Tenga en cuenta que, para que una diapositiva sea visualmente eficaz, es recomendable que no supere las 40 palabras. Personalmente, no suelo pasar de 10 palabras en la mayoría de las que yo elaboro. El resto de la información ofrézcala verbalmente, con su propia voz y estilo. Power Point dispone, bajo cada diapositiva en elaboración, de un espacio para “notas del orador” donde se pueden ir coleccionando los comentarios que luego se harán verbalmente y poder así recordarlos para sucesivas sesiones.

5)      EVITE CONFECCIONAR DIAPOSITIVAS SÓLO CON TEXTO. Si en algún caso está obligado a hacerlo, busque recursos visuales que la hagan atractiva: coloque el texto en recuadros coloreados, distribúyalo en un diagrama, organícelo en una tabla o coloque flechas que indiquen relación lógica entre los términos. Exprese cada idea con una frase breve, mejor que con largas oraciones subordinadas.

6)      Respecto al TIPO DE LETRA:
-Fuente: Busque una tipografía sencilla, poco historiada (Times New Roman, Tahoma, Verdana, Calibri, Arial) y no utilice más de dos fuentes tipográficas distintas, pues se pierde el efecto armónico y la atención se distrae. Si hay datos numéricos, cuide que la fuente elegida discrimine bien las letras de las cifras. Por ejemplo: escribir “once litros” sería más confuso en Times New Roman (11 l) que en Arial (11 l ) y mucho más claro aún en Script o en Trebuchet (11 l).
-Tamaño: Que sea legible con comodidad (piense en las dimensiones de la sala). Use diferentes tamaños para marcar la prelación o subordinación de las ideas. Como orientación tipográfica de mínimos: no menos de 30 puntos para títulos, no menos de 20 para las ideas principales y no menos de 14 para las ideas secundarias.
-Estilo: Si no son muchos, marque en negrita (N) los conceptos clave. Reserve la cursiva (K) para los extranjerismos, los títulos de las publicaciones y los términos de la nomenclatura binomial linneana.
-Color: Busque un buen contraste con el fondo, pero evite esos contrastes estridentes que suelen producir algunos colores junto a sus complementarios. Tenga en cuenta que la iluminación de la sala o la tecnología del proyector pueden rebajar mucho el contraste respecto al efecto que se veía en su monitor. Negro sobre blanco es buena opción y también los amarillos y naranjas sobre fondos muy oscuros.

7)    Para cada diapositiva, PRESENTE LA INFORMACIÓN SECUENCIALMENTE, a medida que discurra la explicación, en lugar de toda de una vez. Power Point ofrece medios de animación muy efectistas en este sentido.

8)      Coloque estratégicamente ALGUNA DIAPOSITIVA “DE RESPIRO”, ya sea en mitad de la presentación de la parte más ardua de la exposición. Una viñeta humorística que guarde relación con el tema o la fotografía de un paisaje abierto expuesta durante unos segundos, son distensiones que, usadas siempre con comedimiento, se agradecen y garantizan una atención renovada.

9)      PROMUEVA LA INTERACTIVIDAD en clase. Hay multitud de técnicas que, al propio tiempo, garantizan la atención mantenida. Ahí van cuatro, a modo de ejemplo:
a.       Introduzca ERRORES DELIBERADOS, para comprobar la capacidad de atención de su audiencia. Recomendamos que sean errores de gran calibre, que el alumno pueda fácilmente detectar. Advierta previamente que existe un error, para evitar que pudiera ser achacado a un descuido por su parte y presente una nueva diapositiva con el error convenientemente corregido (mejor aún si hace uso de las técnicas de animación para corregirlo).
b.      Deje huecos en el texto o en las tablas que los alumnos tengan que completar. Asegúrese de completarlos en la siguiente diapositiva (o recurriendo a efectos de animación), para  garantizar la perfecta comprensión de todos.
c.       Si presenta una sola imagen, pida a los alumnos que la interpreten antes de presentar usted su pie de foto explicativo.
d.      Si presenta varias imágenes similares juntas, intercámbieles maliciosamente el pie de foto y pida a los alumnos que los reasignen correctamente. Muéstrelos ya correctamente colocados en la siguiente dispositiva.
10)   CUIDE LA ÚLTIMA DIAPOSITIVA. Muchos acostumbran a terminar con una broma, que suele ser poco celebrada, pues el auditorio está inquieto ya por marcharse. Hay mejores opciones, por ejemplo:
a.       Ofrezca un RESUMEN de los principales puntos tratados, aquéllos que los alumnos no deberían olvidar.
b.      O exponga algunas REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS recomendables sobre el tema, tan sólo una o dos, bien seleccionadas, con criterios didácticos.
c.       O anuncie el tema y la hora del PRÓXIMO ENCUENTRO, lo que permitirá a los alumnos más inquietos prepararlo con antelación. 
d.      O proporcione algún MEDIO DE CONTACTO que el alumno pueda utilizar para consultar sus dudas o bien recuerde el horario específico de tutorías asignado a este efecto.
e.  O dé simplemente las GRACIAS a la audiencia por su atención.




CUATRO ERRORES FRECUENTES:
1)      Usar Power Point como un atril. Es decir, elaborar todas las dispositivas sólo con texto y limitarse a leerlo literalmente en clase. El efecto es soporífero y la presencia del profesor se hace innecesaria. Las encuestas muestran que es una práctica docente muy criticada por los alumnos.

2)      Colocar demasiada información textual en una sola diapositiva, lo que obliga a emplear una letra tan pequeña, que acaba resultando prácticamente ilegible. Evite estas avalanchas de texto, que caen como plomo sobre la audiencia. De ser necesario, presente la misma información divida en varias diapositivas.

3)      Cuidado con las imágenes decorativas de fondo que se repiten en el diseño de todas las diapositivas. Para no resultar distractoras, deben ser muy sencillas y cromáticamente homogéneas. Son especialmente útiles las que presentan tonos más intensos en los márgenes que en el centro, pues ofrecen un marco visual a la diapositiva y ayudan a centrar la atención. En caso contrario, es preferible prescindir de ellas.

4)      Calcular mal la duración de la presentación, por exceso o por defecto. Generalmente se elaboran más dispositivas de las que después pueden proyectarse durante el tiempo real de la sesión. El único modo de evitar esto es un ensayo previo a tiempo real. De modo aproximado, algunos proponen la norma de incluir tantas dispositivas como minutos tenga la sesión. Vale como aproximación, pero dependerá del ritmo expositivo habitual, de la frecuencia de las digresiones, de la densidad informativa de cada diapositiva y del tiempo que se conceda a la interactividad con el alumno.

      Por último, es preciso recordar que la habilidad docente es una capacidad del profesor, no del recurso (o de la herramienta, como hoy se tiende a decir). Por eso es equivocado suponer que usar Power Point implicará siempre una mejora didáctica en el aula, especialmente si no se hace con la debida coherencia de objetivos. En las manos adecuadas, vale más una buena tiza que un mal Power Point


   (Agradecería a los visitantes que encuentren útil esta entrada, que no duden en incorporar sus propios comentarios, matizando, aclarando o incluso contradiciendo lo que aquí se dice. Estoy seguro de que aprenderíamos mucho más si exponemos la amplia experiencia de otros usuarios habituales del programa Power Point y no sólo la limitada experiencia que yo haya logrado exponer aquí. Basta pinchar en la palabra comentarios, que aparece en naranja al final de la entrada).

3 comentarios:

  1. Sin necesidad de Power Point has elaborado una magnífica exposición, amigo Juan. La pizarra de la fotografía "acojohibe" -como dice otro amigo mío- pero luego tranquilizas con tus didácticas explicaciones.

    Lo cierto es que esa "herramienta" se ha convertido en una necesidad (sin despreciar el uso adecuado de la tiza y el encerado). Para la mayoría de nosotros, ya, -no sólo los muy jóvenes- inmersos en la "cultura de la imagen", un buen Power Point facilita la comprensión de cualquier materia, porque "entra por los ojos". Merece la pena -en mi modesta opinión- el esfuerzo que conlleva su realización.

    Así que, muchas gracias Juan, por esta útil entrada. Procuraré aplicar tus consejos.

    Un cordial y afectuoso saludo.

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  2. Muchas Gracias, Paco. Genial el hallazgo terminológico de "acojohibir", que es de lo más gráfico.
    Recuerdo otro híbrido gracioso de ese estilo: "Es meneciso", para indicar que algo es menester o es preciso, pero totum revolutum.
    Y me acuerdo también de un amigo que, en la época universitaria, iba poco a clase y conseguía sus apuntes en la cafetería, donde en poco tiempo se ponía al día de cualquier novedad. Acostumbraba a decir. "mañana me toca ir a la faculbar".
    Un abrazo

    JV

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  3. Mi amigo Miguel Pineda elaboró para sus alumnos algunas recomendaciones en esta presentación que está disponible en Slideshare: http://www.slideshare.net/elprofedetica/tutorialpresentaciones

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