Luis Soriano es un maestro que siembra cultura y dignidad en las pequeñas aldeas de Colombia. Con sus burros Alfa y Beto, transporta por veredas y campos una biblioteca de sorpresas y de imaginación a los niños que viven en los poblados más apartados de su país, allí donde ni las carreteras llegan.
Pero, en nuestra sociedad del bienestar y la informática, Luis Soriano es también una conciencia que, caminando al paso lento de los burros, nos recuerda a todos que se puede hacer cultura incluso con los más escasos medios.
Una invitación, necesaria y entusiasta, a la utopía es el ejemplo de este maestro-quijote que, en vez de lamentarse de los condicionantes socioeconómicos insalvables, se remanga y se pone manos a la obra.
Agradezco a Esther Briceño la referencia.
Ejemplar entrada esta de los burros sabios, mi querido Juan. Luis Soriano es un personaje que merece ser conocido, un hombre que ha llevado a la práctica una idea digna del mayor elogio. Y tu lo has mostrado aquí de forma magnífica.
ResponderEliminarGracias por todo, y un fuerte abrazo.