¿Quién era Kircher?


ATHANASIUS KIRCHER fue un sabio jesuita alemán que representó el espíritu científico del siglo XVII. Nació en Geisa (Alemania) en 1602. Profesor de filosofía, matemáticas y lenguas orientales, se interesó por los más diversos temas del saber de su tiempo.

Fue el inventor de la linterna mágica, cartografió la Luna, las manchas solares y las corrientes marinas, ofreció hipótesis para interpretar la estructura interna de nuestro planeta, investigó el Vesubio descolgándose por su cráter, trató de descifrar los jeroglíficos egipcios, realizó experimentos de física y fisiología animal, observó la sangre al microscopio e inventó un sinnúmero de artilugios mecánicos.

Junto con Plinio, constituye el paradigma de la curiosidad científica y del gusto por el conocimiento, en cualquiera de sus formas.

sábado, 27 de febrero de 2010

"El diseño chapucero"

Leandro Sequeiros es una persona entrañable.
Es paleontólogo y jesuita, como Kircher, que da nombre a este blog, o como Teilhard de Chardin, cuya obra conoce y entiende como nadie. Leandro es también un verdadero experto en la biología de los ammonites, (curiosos cefalópodos con concha de caracol, antecesores de los calamares de hoy), pero, sobre todo, Leandro es un buen amigo y un conversador muy ameno.

Cada año, a comienzos de agosto, solemos compartir cena y charla en casa. Pasar un rato con él es de lo más estimulante porque es la antítesis del sabio dogmático y fundamentalista que puebla a veces los despachos de la universidad. Es un hombre que busca honestamente, que escucha y aprende de todos y que sería capaz, si  fuera preciso, de poner en cuestión sus propias certezas, porque sabe que lo que sabemos lo sabemos entre todos y que nuestra búsqueda, en el terreno de la fe y de la ciencia, es también la honesta búsqueda de todos los hombres.

Sólo desde este presupuesto de honestidad y desde una sólida formación científica es posible abordar con garantías el diálogo (tan necesario) entre la ciencia y la fe. Leandro reúne ampliamente estos dos requisitos. Desde METANEXUS y desde las universidades de Comillas y de Granada, lleva ya mucho tiempo propiciando un diálogo que las altas esferas vaticanas no acostumbran precisamente a apoyar. Un diálogo que nos aleje de los fundamentalismos, que nos acerque a creyentes y no creyentes y que nos ayude a entender qué es exactamente eso (o ése) que a los creyentes nos gusta llamar "Dios". 

Como creyente, le estoy muy agradecido a la ciencia por el papel que históricamente ha tenido en la desmitificación de esta idea de Dios, que no está en el rayo ni en el trueno, como creían nuestros ancestros, ni creó el mundo en su torno de alfarero como explican las alegorías bíblicas del Génesis, ni diseñó específicamente en su mente las estructuras biológicas que hoy nos maravillan. Es la ciencia la que está capacitada para dar respuestas a las preguntas sobre el cómo. Pero quizá sea la religión la que pueda ayudarnos a responder las preguntas sobre el para qué, es decir, las preguntas sobre el sentido que las cosas tienen para el hombre.

Leandro contagia entusiasmo y humildad por donde pasa. El año pasado publicó en PPC ¿Puede un cristiano ser evolucionista? (Madrid, 2009). La respuesta (que es afirmativa, evidentemente) la desgrana en 222 páginas llenas de amenidad.

Y estos días, estando todavía convaleciente por una prótesis de cadera que acaban de implantarle, ha visto salir su nuevo libro: El diseño chapucero:  Darwin, la biología y Dios. Hemos hablado de él por teléfono, mientras aprendía de nuevo los secretos y la sorpresa del bipedismo, estrenando su nueva cadera de titanio. "Esto sí es diseño inteligente", me decía refiriéndose a la prótesis que acababan de ponerle, " y no lo que algunos pretenden ver en la evolución".

Lectura, pues, recomendable para vacunarse de cierto integrismo católico que pretende resucitar de nuevo el creacionismo más rancio e incluso enseñarlo en las escuelas y los institutos como hipótesis científica(?) alternativa. Lo llaman "Diseño inteligente" (ID) y, ya desde el título, el profesor Leandro Sequeiros lo rechaza de plano. En las páginas que siguen analiza detenidamente sus falacias.

SINOPSIS DE "EL DISEÑO CHAPUCERO"
(Tomada de la página de Ediciones KHAF):
El diálogo entre fe y ciencia es posible.
La fe no nos aleja del método científico. En estos años, numerosas personas de creencias diferentes, están empeñadas en seguir siendo intelectuales, sin que por ello tengan que poner en duda o abandonar su fe y su esperanza en un Dios cercano, perfectamente compatible con la libertad para pensar.
En este libro podemos acercarnos a cuestiones como el creacionismo, las ideas de Darwin, la teoría del Diseño Inteligente o la propuesta atea de Dawkins, esbozando un planteamiento del origen de la existencia compatible con la ciencia y con la fe.



La célula madre y otros dibujos de Guille

CÉLULA  MADRE

Buscando imágenes para ilustrar una actividad sobre células madre, me topé casualmente con El Tintáculo, un blog creado por Guillermo Martínez Vela, estudiante de Ingeniería de Telecomunicaciones, que está repleto de sus dibujos personales. Realizados a bolígrafo, casi todos muestran un humor espontáneo y ágil. La mayoría de las veces hay un juego de palabras detrás, lo que indica que el autor tiene habilidades con la lengua (entiéndaseme bien, por favor), además de mucha gracia artística.

Ahí van dos de los que más me han gustado. Llevan títulos muy escuetos: el de arriba se llama "Célula madre" y quizá se le puedan poner pegas científicas a la existencia insólita de tres centriolos en la célula o al modo tan particular de dibujar la membrana nuclear, pero de lo que no hay duda es de que se trata de una célula madre.

Este otro no necesita más comentario que el título: "Escolopendrive". Magnífica factura la del dibujo, aunque habrá quien eche de menos las forcípulas a ambos lados de la cabeza. Y estupendo también el ingenio indudable de este juego de palabras. Gracias, Guille.

ESCOLOPENDRIVE

(Fuente: El Tintáculo)

martes, 23 de febrero de 2010

L'Hôpital Saint Louis y su museo dermatológico



El museo parisino de l'Hôpital Saint Louis es un magnífico atlas de dermatología en relieve. Pertenece al rico listado de monumentos históricos franceses y alberga casi 5000 moldes en cera que representan otras tantas patologías de la piel y los anejos cutáneos. Es, por tanto, la colección más completa de moldes dermatológicos que puede encontrarse. El Dr. Moritz Kaposi, cuando la conoció en una de sus visitas a París, quedó tan impresionado que quiso inmediatamente iniciar un museo didáctico similar en Viena. Poco después Lyon, Londres, Boston y Filadelfia trataron de imitar esta misma iniciativa.


La colección actual es realmente la suma de cuatro subcolecciones. La inició Devergie en 1867, que encargó una serie de acuarelas para ilustrar de forma didáctica las lesiones dermatológicas y facilitar así a los alumnos y a los profesionales de la medicina el reconocimiento de algunas lesiones cutáneas. A las pinturas se incorporaron luego algunas fotografías coloreadas a mano y 3662 moldes en cera de extraordinario realismo sobre dermatosis y lesiones sifilíticas. Posteriormente se agregó la colección Péan (615 moldes realizados por Baretta), la colección Parrot (88 moldes de patología pediátrica encargados a Jumelin) y la colección Fournier (442 moldes sobre la sífilis hechos por Jumelin y por Baretta).



Por su extraordinario realismo, llaman la atención los trabajos de Baretta, joven artesano que se ganaba la vida haciendo reproducciones de frutas en cera y en pasta de cartón para los hogares parisinos. Un día Charles Lailler,  creador del museo en 1885, se asombró ante el vívido realismo de sus trabajos y le propuso cambiar las manzanas y las naranjas por otros "frutos" menos decorativos, pero más útiles para la docencia y lo contrató de por vida.

 En el museo se conserva igualmente el elegante mobiliario original, con vitrinas y expositores de madera, lo que permite reconstruir toda la atmósfera histórica de esta vieja institución decimonónica. Sin embargo, el catálogo y las descripciones del etiquetado han sido convenientemente actualizados en varias ocasiones. El museo sigue teniendo un indudable valor didáctico para los estudiantes de medicina y para el público interesado, si bien es verdad que la moderna terapéutica ha hecho desaparecer gran parte de las floridas patologías que allí se exhiben o, al menos, las ha vuelto francamente insólitas, por fortuna. 
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No voy a negar que muchos visitantes de este tipo de museos acuden impulsados por el morbo malsano de la atracción de feria, sí, el mismo morbo que llenaba tristemente las sillas cuando se exhibía al hombre elefante o a la mujer barbuda. Pero viene también gente deseosa de asomarse a otra época, de recorrer las vitrinas sabiendo que, tras el vidrio de los expositores, vive la historia misma de la dermatología francesa del XIX y late otra cultura científica y hospitalaria, que no sólo era capaz de sentir curiosidad por lo monstruoso y lo deforme, sino que iba más allá: se preguntaba por sus causas y ponía empeño en encontrar un remedio medianamente expeditivo para el sufrimiento. 





Ya no hace falta acercarse hasta la rue Bichat, en París, para visitar este magnífico museo. La Biblithèque Interuniversitaire de Médecine et d'Odontologie (BIUM) ha realizado un catálogo virtual de cada una de las piezas, de forma que la magia de Internet pone a un solo click del ratón la posibilidad de contemplar con detalle (morboso o científico, que cada uno sea dueño de su mirada) la mayor colección del mundo de moldes de cera. Historia viva de la dermatología francesa. Éste es el enlace.

Más información sobre el Musée des moulages dermatologiques de l'Hôpital Saint-Louis.




(Fotografías: Jim Edmonson y Joanna Ebenstein en Morbid Anatomy)

lunes, 22 de febrero de 2010

Avatar: ¿ciencia ficción o parábola ecológica?



Magníficos efectos especiales los de esta epopeya de James Cameron en la que un ex-marine parapléjico se introduce en un pueblo indígena como infiltrado y acaba, al final, convertido en su líder indiscutible.

La acción discurre en el satélite natural Pandora. Los intereses económicos estadounidenses ponen su objetivo en un valioso mineral energético que aguarda en el subsuelo de las tierras indígenas más sagradas (y nótese que es producción americana: siempre es buena la autocrítica). Hay, quizá, demasiados tópicos, con malos muy malos y buenos muy bondadosos en lucha desigual. La intención no deja de ser buena, porque hay valores muy dignos en juego (la conciencia ecológica, la solidaridad, la tolerancia, el valor, la amistad...). Pero hay un esquema muy simplista de científicos buenos y militares malos, algunos perfiles psicológicos mal resueltos y personajes de piñón fijo, que no experimentan la menor evolución. Y hay hasta un yuppie que es supuestamente el promotor de todo el conflicto económico, tan inexperto y tan mal dibujado que no logra ser creíble. 

En general, están bien cuidados los aspectos científicos. Hay detrás un grupo de especialistas botánicos que han conseguido recrear con fantasía y buen criterio artístico el mundo vegetal que puebla los troncos y el suelo de esta selva tropical, anclada en un planeta imposible. Abundan los helechos, las epifitas y algunos líquenes (con extraños comportamientos que parecen más bien tomados de invertebrados marinos). Mucha originalidad al recrear una amplia variedad de mamíferos, aunque se echan de menos más aves y reptiles y, sobre todo, los anfibios: tratándose de una selva húmeda, extraña no verlos.

Los tipos antropológicos indígenas son, probablemente el mejor hallazgo estético de la película: magníficamente altos y esbeltos. Está muy estudiada la gran seducción de formas y movimientos, la expresividad de unos ojos grandes y luminosos, como los de las rapaces nocturnas, el aire felino del rostro (un marcado hipertelorismo que separa los ojos y ensancha la raíz nasal, como en el síndrome de Crouzon o en el Cri-du-chat), una larga cola que les sirve de eficaz balancín en sus movimientos por las ramas y un órgano empático en forma de trenza que les permite estrechar sinapsis con el sistema nervioso de otros seres y que les resulta esencial en el proceso de domesticación de los animales.

La red invisible de conexiones ecológicas entre los seres vivos se ejemplifica aquí con una metáfora de conexiones sinápticas (quizá a Cajal le hubiera gustado el símil) y llega a alcanzar dimensiones místicas, un poco al estilo del jesuita francés Teilhard de Chardin o de la hipótesis Gaia de Lovelock y Margulis.

La estética del adorno corporal queda a medio camino entre los pueblos amazónicos y los pieles rojas, detalle muy en la línea de los cómics más clásicos del género. Buen trabajo también el de los lingüistas, que han recreado un idioma de sintaxis sugerente y bastante creíble: el omaticaya o na´vi, que cuenta ya con numerosos seguidores y que puede incluso aprenderse en este enlace.

En definitiva, un extraordinario despliegue de medios (impresiona ver el desfile interminable de los títulos de crédito) que muy probablemente Cameron amortice con el gran éxito de taquilla que está teniendo la película, como ya le ocurrió anteriormente con Alien y Titanic. Lástima, únicamente, que este tipo de superproducciones dé tanta importancia a los medios técnicos y descuide tanto la construcción de un buen guión. Con su experiencia, James Cameron debería saber que ésa es precisamente la diferencia entre una película taquillera y una obra de arte.

(Avatar cuenta ya con tres Globos de Oro y tres nominaciones a los Premios Óscar).


El tráiler de la película puede verse en la página oficial: http://www.avatarmovie.com/index.html
o en este vídeo de YouTube:

viernes, 19 de febrero de 2010

Norah Jones canta "Bessie Smith"


(Reposición)
La pianista y cantante estadounidense Norah Jones canta en este vídeo de YouTube "Bessie Smith", uno de sus temas de éxito. Norah Jones hace una música muy grata de escuchar, que es una sorprendente mezcla de estilos entre el jazz, el soul, el blues y el country.
-La grabación pertenece a un concierto en vivo en "The House of Blues", en New Orleans, la ciudad sureña donde se dice que nació el jazz.
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Bessie Smith fue una famosa cantante de blues de los años 20 y 30, conocida como "la emperatriz del blues". Su muerte fue muy polémica, porque se decía que, tras un grave accidente de tráfico, fue llevada al hospital, donde hubo que amputarle un brazo, muriendo pocas horas después. Durante un tiempo circuló el rumor de que en el hospital más próximo no admitieron su ingreso por ser negra, aunque las autoriodades sanitarias negaron siempre que esta discriminación se produjese y afirmaron que la muerte sobrevino como consecuencia lógica del shock hemorrágico sufrido en el accidente.
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Si te animas con el karaoke, los "lyrics" están bajo la pantalla.



Bessie was more than just a friend of mine
We shared the good times and the bad
Many years have since passed me by
I still recall the best thing I ever had

Now I'm going down the road to see Bessie
Oooh... to see her soon
I'm just going down the road to see Bessie Smith
When I get there I'm a wondering what she'll do

Now all the crazy things I had to try
Well I tried them all and then some
If you look you one day you will find out
Where it is that your really coming from

Now I'm going down the road to see Bessie
Oooh... to see her soon
I'm just going down the road to see Bessie Smith
When I get there I'm a wondering what she'll do

(Instrumental)

Now in my day I've made some foolish moves
But back then I didn't worry about a thing
Now and again I still wonder to myself
Was it the sweet love, or the way that she could sing

I'm just going down the road to see Bessie
Oooh... to see her soon
I'm just going down the road to see Bessie Smith
When I get there I'm a wondering what she'll do

Si quieres saber más sobre Norah Jones:
Si quieres saber más sobre Bessie Smith:http://es.wikipedia.org/wiki/Bessie_Smith



martes, 16 de febrero de 2010

¿Hay algún quiosco abierto?: YOUKIOSKE


Parece increíble, pero así es.
En http://www.youkioske.com/ dispones de un quiosco virtual donde es posible ojear (y hojear también) una buena colección de publicaciones periódicas en varios idiomas, catalogadas por temas.
Están perfectamente organizadas en las siguientes secciones:

Prensa: Prensa nacional- Prensa europea - Prensa americana -Prensa deportiva - Otros
Magazines: Ciencia - Salud - Fotografía - Cine - Actualidad/Economía - Viajes - Cultura/Historia -Música -Otros
Cómics
Libros 
Tecnología
Deportes
Motor
Revistas femeninas
Revistas masculinas
Otras publicaciones

Tiene la ventaja de la amplia oferta y de la gratuidad y el mismo inconveniente de los quioscos reales: hay que saber muy bien lo que se busca para no perderse en la inmensidad de la oferta

También aquí, como en los quioscos de las esquinas, está muy presente la pornografía. Es una lástima, porque podría ser un enlace muy útil para incluir en páginas educativas, pero esto ya obliga, al menos, a una advertencia a padres y educadores que la recomienden.

Es importante también caer en la cuenta de la barra inferior de la pantalla para poder acceder a toda la página, que es de formato grande.

Publicaciones de gran difusión como National Geographic, Muy Interesante, Quo, GEO, PCworld, Cosmopolitan o Historia y Vida están aquí disponibles, en algunos casos con la posibilidad de elegir el idioma.

La oferta científica es especialmente interesante: Science, Nature, NewScientist, Scientific American, Smithsonian y muchas más.

Lectura no falta. Quizá lo que nos falte sea tiempo.
¡A disfrutar!

domingo, 14 de febrero de 2010

La poesía o el trayecto ojo-cerebro-mano:

La revista EL CIERVO publica en su reciente número de febrero una breve antología de João Luís Barreto Guimarães, poeta portugués nacido en Oporto. La poesía, dice, "es el camino de la mirada, a través del cerebro, hasta la mano". Una definición de tono neurológico para un arte que pretende, también según sus palabras, “escrutar el sentido trágico del día a día, la trascendencia de la vida cotidiana, ser una mirada nueva sobre aquello que la costumbre convirtió en común.”

Suena hermoso, dicho así. Debe ser la disponibilidad de ánimo en que nos colocan los viajes: nos abren el alma a la novedad y nos invitan a la sorpresa y al hallazgo. Nos enriquecemos en cada trayecto. Y parece que hasta la realidad más vulgar se enriquece también y cobra dimensiones nuevas en el corto (o largo) trayecto que va de la mirada al cerebro y del cerebro a la mano. Hace falta, únicamente, que el ojo, el cerebro y la mano pertenezcan a un buen poeta.





29 DE FEBRERO
Mi vaso de agua 
tiene menos sorbos que el tuyo.


4 DE ABRIL

Um pingo de café desliza pela base da chávena e cai sobre o papel onde escrevo.
Acidente de trabalho.


[Una gota de café se desliza por la base de la taza y cae sobre el papel en que escribo. Un accidente de trabajo.]



Las inquietudes literarias de João Luís Barreto Guimarães puede seguirse a través de sus dos bitácoras: 
en www.joaoluisbarretoguimaraes.blogspot.com habla de su propia obra 
y en www.poesiailimitada.blogspot.com escribe sobre el trabajo de otros poetas.

jueves, 11 de febrero de 2010

La mujer de la ventana

Discurso de Amós Oz en la entrega del Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2007:




LA MUJER DE LA VENTANA

Si adquieres un billete y viajas a otro país, es posible que veas las montañas, los palacios y las plazas, los museos, los paisajes y los enclaves históricos. Si te sonríe la fortuna, quizá tengas la oportunidad de conversar con algunos habitantes del lugar. Luego volverás a casa cargado con un montón de fotografías y de postales.

Pero, si lees una novela, adquieres una entrada a los pasadizos más secretos de otro país y de otro pueblo. La lectura de una novela es una invitación a visitar las casas de otras personas y a conocer sus estancias más íntimas.
Si no eres más que un turista, quizá tengas ocasión de detenerte en una calle, observar una vieja casa del barrio antiguo de la ciudad y ver a una mujer asomada a la ventana. Luego te darás la vuelta y seguirás tu camino.

Pero como lector no sólo observas a la mujer que mira por la ventana, sino que estás con ella, dentro de su habitación, e incluso dentro de su cabeza.
Cuando lees una novela de otro país, se te invita a pasar al salón de otras personas, al cuarto de los niños, al despacho, e incluso al dormitorio. Se te invita a entrar en sus penas secretas, en sus alegrías familiares, en sus sueños.


Y por eso creo en la literatura como puente entre los pueblos. Creo que la curiosidad tiene, de hecho, una dimensión moral. Creo que la capacidad de imaginar al prójimo es un modo de inmunizarse contra el fanatismo. La capacidad de imaginar al prójimo no sólo te convierte en un hombre de negocios más exitoso y en un mejor amante, sino también en una persona más humana.


Parte de la tragedia árabe-judía es la incapacidad de muchos de nosotros, judíos y árabes, de imaginarnos unos a otros. De imaginar realmente los amores, los miedos terribles, la ira, los instintos. Demasiada hostilidad impera entre nosotros y demasiada poca curiosidad.
Los judíos y los árabes tienen algo en común: ambos han sufrido en el pasado bajo la pesada y violenta mano de Europa. Los árabes han sido víctimas del imperialismo, del colonialismo, de la explotación y la humillación. Los judíos han sido víctimas de persecuciones, discriminación, expulsión y, al final, el asesinato de un tercio del pueblo judío.


Cabría suponer que dos víctimas, y sobre todo dos víctimas de un mismo perseguidor, desarrollarían cierta solidaridad entre ellas. Desgraciadamente las cosas no son así, ni en las novelas ni en la vida real. Por el contrario, algunos de los conflictos más terribles son aquellos que se producen entre dos víctimas de un mismo perseguidor. Los dos hijos de un progenitor violento no tienen por qué amarse necesariamente. Con frecuencia ven reflejada el uno en el otro la imagen del cruel progenitor.


Exactamente así es la situación entre judíos y árabes en Oriente Medio: mientras los árabes ven en los israelíes a los nuevos cruzados, la nueva reencarnación de la Europa colonialista, muchos israelíes ven en los árabes la nueva personificación de nuestros perseguidores del pasado: los responsables de los pogroms y los nazis.


Esta realidad impone a Europa una especial responsabilidad en la solución del conflicto árabe-israelí: en lugar de alzar un dedo acusador hacia una u otra de las partes, los europeos deberían mostrar afecto y comprensión y prestar ayuda a ambas partes. Ustedes no tienen por qué seguir eligiendo entre ser pro-israelíes o pro-palestinos. Deben estar a favor de la paz.


La mujer de la ventana puede ser una mujer palestina de Nablus y puede ser una mujer israelí de Tel Aviv. Si desean ayudar a que haya paz entre las dos mujeres de las dos ventanas, les conviene leer más acerca de ellas. Lean novelas, queridos amigos, aprenderán mucho.


Las cosas irían mejor si también cada una de esas dos mujeres leyese acerca de la otra, para saber, al menos, qué hace que la mujer de la otra ventana tenga miedo o esté furiosa, y qué le infunde esperanza.


No he venido esta tarde a decirles que leer libros vaya a cambiar el mundo. Lo que he sugerido es que creo que leer libros es uno de los mejores modos de comprender que, en definitiva, todas las mujeres de todas las ventanas necesitan urgentemente la paz.


Quiero agradecer a los miembros del jurado del premio Príncipe de Asturias que me hayan otorgado este maravilloso Premio.

Muchas gracias y mis mejores deseos a todos ustedes. Shalom u-brajá.


El Pais Traducción del hebreo de Raquel García Lozano

viernes, 5 de febrero de 2010

La parábola del rabino

En la ciudad de Serba vivía un viejo rabino con fama de sabio. Un hombre, que supo de su fama, pensó que quizá merecería la pena viajar hasta allí para consultarle un asunto de negocios que llevaba un tiempo preocupándole.
Al llegar a la casa del rabino le sorprendió la absoluta austeridad en que vivía. Los únicos muebles eran dos sillas y una estera, enrollada en una esquina, que hacía las veces de colchón. El viajero empezó a dudar de que aquél fuera realmente un hombre sabio en materia de negocios, a juzgar por su extrema pobreza.
Desencantado, el viajero preguntó:
--¿Y dónde están tus muebles?
Y el rabino contestó:
--¿Y dónde están los tuyos?
--¿Cómo que dónde están los míos?--protestó el viajero-- ¡Yo sólo estoy aquí de paso!
--Pues yo también estoy de paso y vivo de paso--contestó el rabino--.

(Adaptado de un viejo cuento hebreo)
Imagen: Abbas, fotógrafo francés de origen iraní.