¿Quién era Kircher?


ATHANASIUS KIRCHER fue un sabio jesuita alemán que representó el espíritu científico del siglo XVII. Nació en Geisa (Alemania) en 1602. Profesor de filosofía, matemáticas y lenguas orientales, se interesó por los más diversos temas del saber de su tiempo.

Fue el inventor de la linterna mágica, cartografió la Luna, las manchas solares y las corrientes marinas, ofreció hipótesis para interpretar la estructura interna de nuestro planeta, investigó el Vesubio descolgándose por su cráter, trató de descifrar los jeroglíficos egipcios, realizó experimentos de física y fisiología animal, observó la sangre al microscopio e inventó un sinnúmero de artilugios mecánicos.

Junto con Plinio, constituye el paradigma de la curiosidad científica y del gusto por el conocimiento, en cualquiera de sus formas.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Citas célebres: Ruyard Kipling

                                                  (Foto de Durandarte en Panoramio)

Si puedes ver demolida la obra de tu vida

y, sin pronunciar una sola palabra, volverla a reconstruir,

o perder de un golpe la labor de cien esfuerzos,

sin un suspiro ni un gesto.

Si puedes amar sin enloquecer de amor

y ser fuerte sin dejar de ser tierno.

Y, sintiéndote odiado, no odias a quien te odia,

aunque luches y te defiendas.

Si puedes soportar las palabras burlonas que,

con razón o sin ella, se digan de ti

y que se propalen mentiras sobre tu conducta,

sin tú mentir jamás.


Si puedes amar como a un hermano a todos tus amigos,

sin que ninguno ocupe todo tu corazón.


Si puedes ser bueno y sabio, sin hacerte escéptico o destructor;

soñar, sin que el sueño te domine nunca

y pensar, pero siendo algo más que un pensador.

Si puedes mantenerte digno dentro de la popularidad

y mantenerte pueblo aunque seas consejero del rey.

Si puedes mirar el éxito y el fracaso,

como las dos caras de una misma mentira...

Entonces,

tendrás algo que vale mucho más que el dinero, la fama y la gloria. Entonces, hijo mío, serás dueño de ti mismo.


(Adaptado de Ruyard Kipling, premio Nobel de Literatura 1907)

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